miércoles, 7 de febrero de 2024

LA MONJA ALFÉREZ. De Catalina Erauso

 BENDICIÓN DEL XXX SUPERIOR GENERAL DE LA 
CURIA GENERALIZIA DELLA  COMPAGNIA DI GEZÚ


MIEMBRO DE LA ACADEMIA LATINOAMERICANA 
DE HISTORIA MILITAR

Y

PRIMER OFICIAL DE COMUNICACIONES DE LA
GENDARMERÍA NACIONAL ARGENTINA 
DIPLOMADO EN DEFENSA NACIONAL 

El Diplomado en Defensa Nacional está capacitado para conformar equipos de trabajo abocados al análisis y resolución de problemas técnicos (obtención de datos, asesoramiento sobre áreas específicas, determinación de dimensiones a ser evaluadas, entre otros), aplicando los conocimientos y la práctica adquiridos en temas afines con el área de la Defensa (Incluye la Seguridad Interior). 

De Catalina Erauso no se sabe con exactitud el lugar y fecha de nacimiento, acaecida cerca de 1585, probablemente en san Sebastián, España. 

De niña fue internada en un convento de monjas pero hastiada de esa vida se fugó ejerciendo distintas actividades para ganarse la vida, inclusive hasta el robo. 

Ya adulta se había convertido en una mujer que ganaba dinero mediante los juegos de azar en donde llegaba hasta matar a aquellos que le hacían trampas. 

Sintiéndose perseguida por los asesinatos de ello derivado decidió embarcarse hacia las colonias españolas de América. 

Para ello se hizo pasar por hombre usando un nombre varonil, cosa que su también condición de lesbiana le facilitaba el camino. 

Al llegar al Perú se encontró con que un hermano suyo, Miguel, era un hombre del gobernador y se hizo a su servicio, pero nunca reveló su identidad real. 

Nadie veía en ella a un hombre. Se entreveraba con varones en cantinas y como siempre jugando y apostando. 

Con frecuencia, se enfrascaba en duelos a espada donde demostraba gran habilidad con esa arma. 

Estuvo encarcelada pero al poco salir sin saberlo se enfrentó en duelo matando a su propio hermano Miguel. 

Pronto se enroló como soldado para integrar las tropas expedicionarias contra los indios araucanos del sur de Chile, esto para escapar de quienes querían vengarse de ella. Demostrando ser un excelente soldado obtuvo el ascenso a Alférez. 

Tiempo después pasó a luchar en otros países de Sudamérica siempre con sus habituales costumbres incluso estando a punto de ser ahorcada. 

Al regresar a España, donde se dedicó a comerciar tuvo que ir a Roma a confesar al Papa su verdadera condición de mujer. 

Obteniendo el perdón produjo que su fama se extendiera y adquiriera aclamación al conocerse su historia. 

Se dice que la iglesia le permitió seguir viviendo y vistiendo como hombre. 

"La monja Alférez", como es conocida en su historia, después irse a trabajar a México, como se cree, murió en 1650.


D CARLOS GUSTAVO LAVADO RUÍZ ROQUÉ LASCANO 
 SOBERNA COMPAÑÍA DE LOYOLA
FUNDADOR 1ER GENERAL


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