EPISTEMÓLOGO DE LA ORDEN DE CABALLERÍA
“Definitivamente las FARC no se han desarmado y no parece claro
que estén dispuestas a hacerlo…” A. González Martín** – 30 Ago 17 (1).
1. Un “desaparecido” en el desierto patagónico.
2. Las FARC-EP ¿están desarmadas?, y… ¿están aquí?
3. Más allá del eventual “desaparecido”.
1. Un “desaparecido” en el desierto patagónico.
En estos primeros días de Sep 17, mientras los argentinos
esperamos una nueva primavera y las elecciones legislativas de Octubre, el
antiguo proceso revolucionario setentista se ha reactivado con indudables fines
electorales. En el desierto patagónico hubo -al parecer misteriosamente- un
“desaparecido”.
Las “organizaciones de DDHH” en los últimos treinta y cinco años
desarrollaron una intensa “comunicación psico-política” (2) como directas
continuadoras de las operaciones revolucionarias iniciadas en 1959 por la
“guerrilla armada”. Construyeron -desde 1983- un “relato”, según el manual de
Antonio Gramsci, tras la derrota de las bandas armadas en los singulares
combates -1974/1988- de la “guerra asimétrica” contra-insurgente, o
contra-terrorista, según el nivel en que se la considere.
Es esa intensa y masiva narrativa épica la que permite hoy una
aviesa y planificada maniobra política, como única bandera electoral disponible
por parte de la “pseudo-revolución, en manos de la hipocresía KK.
En aquel elaborado relato surgieron términos-símbolos. Entre
ellos, uno insignia: “desaparecido”. Esta palabra es llave en la sibilina
maniobra, en plena ejecución pre-electoral, exista o no el desaparecido.
“Desaparecido” ha sido y es la palabra de mayor empleo en la comunicación
tansculturizadora, a lo largo de las últimas décadas. Pero no deja de llamar
nuestra atención que, después del 10 Dic 15 y habiendo pasado ya más de un año
y medio desde aquella fecha, aun haya seguidores ingenuos o inocentes del
perverso “relato”. Que el núcleo duro K lo sostenga, es comprensible, pero que
exista una majada neutra y mansa que los siga, debería preocuparnos como
sociedad.
La profesora Lic. Analía L. Pastran (3) del IEEBA,
-especializada en comunicación política-, a través de una cita nos explica así
al fenómeno socio-comunicacional:
Por comunicación podemos entender -según José Luis Sánchis- “… aquellos
procedimientos por medio de los cuales una mente afecta a otras (…). La
comunicación busca siempre un feetback, una respuesta del receptor desde la
cual puede aprender y desarrollarse; así se habla de comunicación perfecta
cuando el mensaje ha sido bien recibido y se produce la reacción deseada en el
receptor. La comunicación tiene un ingrediente de cultura, de
inter-subjetividad y de inter-relación”.
Podríamos agregar aquí que esa comunicación puede ser empleada apuntando al
bien común o a la creación de una engañosa “falacia” política, encubridora de
propósitos inconfesables, como lo ha sido el caso argentino reciente, que nos
puso al borde de un drama similar al que padece Venezuela.
La marcha convocada por las Organizaciones de DDHH en la CABA el
día viernes 01 Sep 17, ha sido una comprobación concreta del fenómeno citado.
Otra, que lo ratifica, fue la del 2x1. Conocedores del fruto de la “reacción
deseada en el receptor”, los revolucionarios de cartón explotan electoralmente
el “ingrediente de cultura, de inter-subjetividad y de inter-relación”.
Sobre ese cultivo se encuentran las únicas banderas disponibles
para el nuevo neo-marxismo pseudo-revolucionario. No es Macri quien “ya tiene
su desaparecido” como lo dice “el perro” Verbitzky en Página 12; sino Cristina,
que lo necesita imperiosamente. ¿Qué otra bandera tiene para alcanzar los
fueros parlamentarios, sino explotar lo sembrado en la últimas décadas? Ayer
ingresaron por las quebradas del NO, con armas y hoy lo hacen con el
“indigenismo radical”, por los portillos del SO, con un “desaparecido” y…¿con
armas?...
2. Las FARC-EP ¿están desarmadas?, y… ¿están aquí?
Pero, detrás del dudoso y eventual “desaparecido” hay una
compleja trama que parcialmente hemos citado en un artículo del 01 Ago 17 (4),
en el que decíamos:
“El XXIII Encuentro del Foro de San Pablo -FSP- acaba de desarrollarse en
Managua -Nicaragua- entre el 15/19 Jul 17, bajo dirección del sandinismo por
ausencia de su fallecido presidente/fundador -Fidel Castro- y de su
vice-presidente -Lula-, sentenciado a nueve años de prisión, por corrupción. El
informe final del Encuentro expresa claramente”:
“Las fuerzas de izquierda y progresistas perdieron el control del Poder
Ejecutivo en Honduras, Paraguay, Argentina y Brasil y resisten en Venezuela,
Bolivia, Ecuador, Uruguay, Nicaragua y El Salvador”. Por estas razones la
directiva establece como nuevo objetivo: “buscar la unidad de las izquierdas
revolucionarias y organizar la resistencia, hasta que se inicie la
contraofensiva”.
Las FARC retienen un peso específico central en la dirección del
FSP y están presentes en nuestro Cono Sur. Veamos lo que expresa una
prestigiosa institución española, el Instituto Español de Estudios Estratégicos
-IEEE-, a través de su investigador Andrés González Martín, que nos da una
categórica respuesta -el 30 Ago 17- a una de las preguntas de nuestro
subtítulo: “las Farc no están desarmadas”, “no han entregado todo su arsenal”.
¿Es de interés para los argentinos esta información? Nuestro
Instituto -IEEBA- entiende que es de enorme importancia. Las FARC son -sin
duda- el actual pivote del antiguo proceso revolucionario iberoamericano.
Constituyen el eje de poder del FSP -órgano director político/estratégico de la
revolución iberoamericana- y sabemos que están presentes en Bolivia y Paraguay
desde hace muchos años y que también lo hacen en la “Araucania” chilena.
¿Estarán en la pretendida área de la Patagonia argentina ocupada por los
“noveles mapuches” o antiguos araucanos chilenos, en donde se han cometido
últimamente un sinnúmero de crímenes con el sello de las FARC?
En Bolivia, el ex Ministro de Defensa Sr. Kieffer, aseguró la
presencia de las FARC, desde 1998. En Paraguay, el Fiscal Alejo Vera confirmó
tener pruebas de la histórica relación del Ejército del Pueblo Paraguayo -EPP-
con las FARC, desde 2008. En Chile la relación del PC chileno con las FARC
quedó evidenciada en las computadoras encontradas en el cuartel general de Tiro
Fijo, en Ecuador, luego de que la Fuerza Aérea Colombiana lo bombardeara.
En esos documentos se encontró el acuerdo para que las RAM se
capacitaran con las FARC en Colombia. Se trata de los cursos de entrenamiento
especial recibidos por Facundo Jones Huala y su grupo, que en los últimos meses
produjo un centenar de graves hechos terroristas en ambos lados de la
cordillera, con fines políticos. Chile le ha solicitado la extradición,
acusándolo de terrorista. Ésta fue denegada por un Juez Federal argentino y aun
sigue irresuelta. A su vez el Gobernador del Chubut ha pedido el juicio
político al mencionado Juez y no conocemos en que laberinto se atascó.
Llama la atención que frente al mencionado cuadro de situación,
Jones Huala se haya presentado espontáneamente a un control de rutas de la
Gendarmería Argentina, sabiendo que es buscado por Interpol. Allí comienza el
drama o ¿la farsa? del “desaparecido” Maldonado, que hemos calificado como muy
probable “maniobra planificada”. Si así fuere, el FSP-FARC tendría el total
control de la operación pre-electoral.
Respondida una parte de la pregunta formulada en el subtítulo y
con la seguridad que las FARC están presentes en nuestra región desde hace
tiempo, tenemos la intima convicción que, alcanzado el tortuoso y dudoso
acuerdo de Paz con el presidente Santos, su alta conducción ha desplazado hacia
la Araucania hombres y armas, por imperiosas necesidades logísticas de su
cartel de la cocaína, que es la fuente de su poder y que está fuera del alcance
del Tratado de Paz.
El enorme espacio vacío de nuestra Patagonia les ofrece la
posibilidad de ocultar allí grandes depósitos de drogas y armas. Por ello están
desplazando por el terror a los puesteros de inmensas estancias, con las RAM,
que ellos adiestraron con anterioridad. La comprobación de este supuesto la
tendremos cuando se conozcan las cargas de cocaína que se decomisarían en los
puertos patagónicos del Atlántico, en un futuro cercano. Los indicios ya
existen.
Con referencia a la otra pregunta que nos formuláramos: ¿las
FARC, están desarmadas?, la respuesta es no lo están y en eso coincidimos con
González Martín (1) cuando expresa que después del Tratado de Paz “podrían
convertirse en un partido político armado” y agregamos, “con un creciente poder
económico” compuesto por miles de millones de narco dólares, que les aseguraría
llegar a la presidencia de Colombia en el mediano plazo. Es lo que el
presidente Santos -premio Nobel de la Paz al estilo de nuestro Pérez Esquivel-
ha logrado, y lo que el ex presidente Uribe predijo antes de la consulta para
la aprobación del “acuerdo de Paz”.
El 26 Jun pasado, la misión de la ONU en Colombia anunció que
las FARC habían entregado 6803 guerrilleros y 7132 armas -fusiles y armas de
puño-; pero ello no significa que se hayan desarmado totalmente. Gran parte de
la prensa mundial interpretó mal ese hecho, manifestando que la organización se
había desarmado. 1200 ex guerrilleros pasaron a formar parte de la Unidad
Nacional de Protección -UNP-, escoltas de los nuevos políticos y ex jefes
provenientes de las FARC. Otros han formado empresas de seguridad privada, al
servicio de otras empresas de ex componentes de la organización armada.
Medio millar de disidentes de las FARC decidieron no ingresar al
Tratado. Continúan en rebeldía y con las armas en sus manos. A ello debemos sumar
aproximadamente mil quinientos guerrilleros desplegados en Venezuela que
continúan en ese país. Lo más trascendente es que existen aun más de
novecientos almacenes secretos. Las FARC han manifestado que no tienen
inventarios de material de guerra -por lo menos para la ONU y el gobierno-. No
hay certeza de lo que aun no se ha entregado, pero es muy probable que lo hecho
no llegue al 50% de lo existente.
Un dato preocupante, que no aparece, es el de los misiles
portátiles tierra aire y los misiles antitanques. Se calcula que suman varios
centenares. A este arsenal disperso se suman las minas antipersonales. Los
campos de coca de las FARC están protegidos por campos minados. Hubo once mil
bajas producidas por minas en los últimos años y solo las FARC tienen los
planos de los campos que han sembrado. El efecto psicológico de su sola
existencia, sobre la población, limita seriamente el desplazamiento en las
zonas rurales.
A fines del mes de Jun 17 se habían intervenido setenta y siete depósitos, de
un total declarado de novecientos cuarenta y nueve. En esos depósitos, además
de armamento, materiales, munición y vestuarios, hay mucho dinero. Hay un gran
número de civiles que compiten con los guerrilleros disidentes para apropiarse
de los depósitos enterrados. Al no poder bancarizar sus ingresos negros, la
organización ha tenido que recurrir a lo que se conoce como “El Dorado de las
FARC”, en la selva.
La minería es otro de los grandes ingresos de las FARC y gran
parte de ella está trabajando legalmente, administrada por testaferros. El
Procurador General de Colombia ha declarado que la mayor fortuna del país es la
de las FARC. El Ministerio de Hacienda la calcula en 39 billones de dólares. El
Procurador ha declarado que “el Tratado de Paz puede terminar siendo la mayor
operación de la Historia de lavado de dinero”.
3. Más allá del eventual “desaparecido”.
La antigua revolución estalinista que afectó a toda Iberoamérica
desde 1959, evoluciona a un neo-marxismo progresista, altamente violento y
corrompido. Mientras está en retirada en algunos países de la región, cuenta
hoy con Las FARC -en Colombia- como un nuevo partido armado y financieramente
poderoso -con base en un país importante- que ha extendido ya sus tentáculos
armados hacia el Sur, en las preliminares de una contraofensiva revolucionaria.
El poder vicario depositado por Cuba en Venezuela se desplaza
inexorablemente a Colombia y Cuba, sin Fidel, deberá encontrar un nuevo socio,
entregando probablemente -para sobrevivir- el petróleo y los puertos
venezolanos a China y Rusia. Brasil -en crisis- estaría maduro para negociar
con sus izquierdas con las FARC en Bogotá, y no sabemos qué futuro le aguardan
a Chile-Perú y Argentina, con regímenes no consolidados.
Nuestra querida Patria, carente de una Política de Defensa y de
su correspondiente planeamiento estratégico que active al subsistema de
inteligencia estratégica, ha perdido la iniciativa estratégica y
-consecuentemente- su libertad de acción, como lo evidencia la maniobra
política con eje en un “sorpresivo desaparecido”. La Argentina está hoy en un
doble riesgo: en el corto plazo puede perder el rumbo tomado el 10 Dic 15, para
regresar caóticamente a la etapa anterior, en el 2019. En el mediano plazo
podría escalar desde el actual “estado de guerra civil”, a una situación
belígera asumida sin planeamiento estratégico, improvisadamente, como lo
hicimos en los ´70 y en el ´82. En esta oportunidad la consecuencia más
probable sería su desintegración social y geográfica.
Sobre la conciencia -si la hubiere- de los legisladores que nos
dejaron desde el ´88 en total inseguridad estratégica y pública, pesan ya miles
de muertes, que diariamente siguen acumulándose. Se le ha entregado legalmente
al “esfuerzo nacional de policía” la responsabilidad de prever los riesgos y
amenazas estratégicas posguerra fría, para extrañar a las FFAA del Estado
Nacional. Lo han logrado, con absoluta inconsciencia, ignorancia e
irresponsabilidad. Las Policías actúan reactivamente. La actitud proactiva
exige planeamiento estratégico y éste es ajeno a las policías, aquí o en la
China.
A esta “venganza” irracional de nuestros revolucionarios y sus
simpatizantes hipócritas, debemos sumar el arrasamiento institucional del
politizado sistema judicial. Podríamos llegar, en breve, a la paradoja de
continuar con los “juicios de lesa humanidad” mientras el mismo Estado Nacional
está siendo agredido y lucha nuevamente con los continuadores de los que lo
hicieron en los ´70 y que lo explotan -políticamente- desde el ´83. Son las
paradojas de la inmadurez, la ideologización de la Política y de la debilidad
cultural -corrupción- de un pueblo.
Más allá del “desaparecido” hay una dramática historia que hemos
aceptado reemplazar por una narrativa o relato, impuesto por un enemigo
derrotado en combate. Una profunda “grieta” divide a una mayoría social pasiva,
escasamente comprometida, que no ha encontrado un liderazgo a la medida de la
crisis, de una minoría activa, híper-ideologizada, rentada, bajo una conducción
revolucionaria internacional, lúcida y experimentada para operar las guerras de
séptima generación. Mientras tanto nuestra dirigencia discute el sexo de los
ángeles.
CITAS:
*Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército Popular.
(1) A. González Martín. “Las FARC no están desarmadas”. 30 Ago 17.www.ieee.com.es
(2) En particular el CELS de Horacio Verbitzky y el diario Página 12.
(3) A. L. Pastran. “La Comunicación como Estrategia”. Ago 17.www.ieeba.com.ar
(4) H. J. Auel. “Política de DDHH Vs. Política de Seguridad Nacional”. 01 Ago
17. www.ieeba.com.ar