Bandera de las Américas, adoptada como símbolo
de las Américas por la séptima conferencia
internacional Americana de Montevideo
el 13 de diciembre de 1933.
La política integral del Perú en materia antidrogas es un ejemplo para el mundo, al abarcar el control y erradicación de hoja de coca, el desarrollo alternativo, así como la prevención, asistencia y rehabilitación de los drogodependientes, destacó la Organización de Estados Americanos (OEA).
Paulina Duarte, directora del Departamento de Seguridad Pública y secretaria interina de Seguridad Multidimensional de la OEA, recalcó que en los últimos años el Perú redujo de forma sorprendente sus cultivos ilegales, con voluntad política y una visión descentralizada del tema.
Según cifras oficiales, desde el año 2011 el Perú logró erradicar más de 100,000 hectáreas de hoja de coca ilegal, además de haber reducido el año pasado su espacio cocalero en casi 14 por ciento, al pasar de 49,800 a 42,900 hectáreas, la extensión más baja desde
1998.
La representante de la OEA también calificó de “excelente” el trabajo del Perú en materia de control de insumos químicos destinados a la elaboración de drogas cocaínicas, así como el profesionalismo que demuestra la Policía y las autoridades, incluso en zonas de frontera.
A esto se suma el presupuesto y la voluntad política para enfrentar el problema, así como el trabajo de prevención en las escuelas y en la comunidad, por lo que –remarcó- la OEA observa como “muy promisoria” esta política integral de combate a las drogas aplicada en el Perú.
“Lo que está pasando en Perú es un ejemplo para el mundo, porque el Perú ha apostado por una política integral. Las cifras peruanas presentan los mejores índices y demuestran que el Perú tiene hoy un modelo para mostrar al mundo”, anotó la especialista, en diálogo con la Agencia Andina.
Para Duarte, investigadora brasilera con más de 30 años de experiencia en materia de drogas, la política peruana también se ha nutrido del intercambio de experiencias con otros países, puesto que no existe nación que esté ajena al problema de las drogas.
En ese sentido, hizo votos, a título personal, para que el nuevo gobierno que conduzca los destinos del Perú a partir del
2016continúe esta política integral y este legado que deja el país, o incluso pueda incorporar las mejoras que sean
necesarias, a fin de evitar caer en retrocesos en la materia.
“El nuevo gobierno va a partir de una condición muy buena, muy avanzada. No es una opinión, son los números dados no por las personas, sino por organizaciones independientes comoNaciones Unidas, la OEA, que tienen la responsabilidad sobre el tema”, comentó.
A su criterio, el trabajo que actualmente realiza el mundo en materia antidrogas obliga a trabajar bajo esa perspectiva de integralidad, es decir, sin catalogar a los países con la etiqueta de productores, consumidores o de tránsito de estupefacientes ilegales.
“Todos tenemos estos problemas y las mejores alternativas serán aquellas que se tomen en conjunto, compartiendo responsabilidades y buscando alternativas concretas”, aseveró.
Paulina Duarte participa en el 58° Periodo Ordinario de Sesiones de la Comisión Interamericana Para el Control del Abuso de Drogas (CICAD-OEA), que se realiza en Trujillo, con participación de 26 delegaciones, que reúnen a más de 100 participantes.
La cita empezó el último miércoles y permite abordar durante tres días la problemática de las drogas en el ámbito de continente.
Además, el Perú asumirá en esta cubre la presidencia de la CICAD- OEA, que la ejercerá el presidente ejecutivo de la Comisión Nacional Para el Desarrollo y Vida Sin Drogas (Devida), Alberto Otárola, quien también participa en las reuniones plenarias de este evento hemisférico.
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