Soberana Compañía de LOYOLA Prensa : Acto de Malvinas en la Plaza Irlanda. Por el Cte Grl (R) Dr Ricardo Spadaro VGM

Estimados

En la fecha participé del acto de Malvinas en la Plaza Irlanda, donde sobriamente se recordó las primeras jornadas de la Recuperación de las Islas en discursos de un soldado, un suboficial y el Adjunto mensaje leído por el Almte. Molina Pico ( Cte. de una de las fragatas de desembarco) donde narra objetivamente lo ocurrido y concluye con la lectura de las conclusiones del Informe Rattembach.

Fue un acto de respeto, sin resentimientos y con la mirada en la turba y el fondo del mar, donde quedaron nuestros héroes.

Lamentablemente hoy hemos escuchado a numerosos periodistas y supuestos investigadores e “ intelectuales” decir “ Invasión” en un discurso en línea con la posición británica; inclusive renegando de que la CN incluya en su reforma de 1994 una clausula expresa y hasta pidiendo que se cambie la fecha del 2 de abril para no sensibilizar al usurpador y se elimine la Inclusión de Ushuaia como capital de ese territorio, etc. etc.

Escuche decir “Invasión inútil, con muertes inútiles” por periodistas argentinos, como homenaje a los caídos.

El grado de confusión de estos días solo es posible, por la culminación de un largo proceso no ya de desmalvinizacion, sino de desestimación de la nacionalidad, so pretexto de imputar “ afiebrados nacionalismos” a quien sostenga la Causa de Malvinas y en ese cajón de sastre, incluyen a toda la dirigencia o autoridad de cualquier signo, que intente rescatar que fue una Causa Justa – mas allá de los móviles políticos que la historia dirá al final- y que los muertos como el Primer Alférez Sánchez pidiendo en su testamento el sable de Güemes para su esposa e hija ( cumplido en plena Guerra por Gendarmería en Atucha); o el Sarg Ayte Acosta, pidiendo que su hijo supiera que lo amaba aunque no pudo despedirse y escribió esa carta histórica que los gendarmes atesoramos y que yo mismo cumplí al entregarle en su nombre a ese hijo, el rosario blanco que nos diera el Padre Astolfo- nuestro extraordinario capellán-; o Nasif con su condición de joven y valeroso comando o Misael Pereyra que no pudo conocer a su hijo en gestación, o Treppo que soñaba con regresar a retirar el automóvil que había ganado en una lotería o Guerrero y Verón que querían repetir sus hazañas anteriores en los hielos continentales, fueron en definitiva “ muertes inútiles”. Nó !!! No lo fueron.

Demasiado silencio nos vuelve cómplices. Por ello, además de reenviar este discurso, deseo expresar a mis camaradas y a los familiares de nuestros caídos, que nunca una muerte por la Patria, es desdorosa. Y Malvinas, es la Patria.

Sin esos valores, somos un conglomerado de habitantes pujando como las aves carroñeras, sobre los despojos de la idea y sentimiento de Nación.

Esas posiciones que representan el abandono de Malvinas– que pueden expresarse en democracia gracias al sistema republicano- deben no obstante recordar que hay una amonestación desde la Historia, en apoyo al Br Grl Rosas al dar reiteradas batallas al mismo invasor coaligado con otra potencia europea y en rechazo de las maquinaciones colaboracionistas internas:

Desde los unitarios: ( que no eran “nacionalistas”....)

Florencio Varela escribía el 20 de abril de 1838 a Juan María Gutiérrez, ( que sugería adherir a la intervención Francesa :

Conociéndome Ud. bien no debió dudar de mi opinión en la cuestión francesa. Yo no tengo partido en cuestiones nacionales; el extranjero armado contra mi país nunca tiene razón para mí.

y desde el Padre de la Patria :

”....pero lo que no puedo concebir es que haya americanos que por un indigno espíritu de partido se unan al extranjero para humillar a su patria y reducirla a una condición peor que la que sufríamos en tiempos de la dominación española. Una tal felonía ni el sepulcro la puede hacer desaparecer."

Estimados Camaradas y amigos:

Nuestros 649 argentinos sepultados en el mar y en la isla y los 1.082 heridos; entre estos últimos el Sarg lro Dr. Guerrero recientemente fallecido tras cargar la cruz de su invalidez que no le impidió graduarse de abogado y caminar con la frente altiva, no fueron bajas inútiles.

Esta Nación no puede olvidar al Tambor de Tacuarí cuando dice “ Chicos de la Guerra” ni a los adolecentes que recuperaron Buenos Aires de la invasión británica de 1806/7 entre los que estaba el hidalgo Cadete Güemes de 14 años...ni al valor de soldados de 18 años en Malvinas, que no necesitan ser humillados con la discriminación de la edad, para dar testimonio por la tierra de sus padres... La Patria.

Tampoco pueden prescindirse de los Jefes, oficiales y suboficiales de nuestras FFAA , cuyo méritos ahogados por la desmalvinizacion, aunque dieron suficiente testimonio de grandeza, como lo dice el mismo informe Rattembach que hoy conocemos oficialmente.

Los soldados nunca van solos a una Guerra!!!

Las pasiones nos han hecho perder la noción del otro; del próximo que es mi prójimo bajo la misma Bandera de Belgrano !!! y ”... las turbulencias sangrientas del pasado reciente no deben destruir el futuro....”(Mandela).

Hasta Siempre, Malvinas Argentinas!!! 2 de abril de 2012. Cte. Grl Spadaro VGM.