Randolph H. Pherson es director ejecutivo de Globalytica, y enseña “Técnicas Analíticas Avanzadas y Métodos de Pensamiento Crítico” a analistas, tanto en el sector gubernamental como en el privado.
Autor de ensayos como “Cases in Intelligence Analysis: Structured Analytic techniques in Action” y de “Critical Thinking For Strategic Intelligence”, en el año 2000 Pherson puso fin a una carrera de 28 años en la comunidad de inteligencia con un último destino como oficial de Inteligencia Nacional de Estados Unidos para América Latina.
Previamente, en la CIA, había encabezado y dirigido la elaboración de análisis de inteligencia para áreas que incluían el sur de África, Irán, Cuba y América Latina. Ahora, Randolph H. Pherson publica en España su último libro “Técnicas Analíticas Estructuradas para el análisis de inteligencia” (Plaza y Valdés Editores).
“Técnicas Analíticas Estructuradas para el análisis de inteligencia” es una recopilación exhaustiva de un conjunto de técnicas de las cuales los analistas se pueden servir para incrementar la calidad de su trabajo. Se trata de técnicas que proceden en gran medida del mundo de la inteligencia, pero que también se convierten en herramientas prácticas para otros analistas pertenecientes a una amplia gama de profesiones tales como las relacionadas con la aplicación de la ley, la medicina, las finanzas y los negocios.
¿Cuáles son las principales novedades que aporta su libro “Técnicas analíticas estructuradas para el análisis de inteligencia”?
El libro introduce el concepto de técnicas analíticas estructuradas en los servicios de inteligencia y, además, lo extiende a un público más amplio, ya que, por ejemplo, puede servir para aportar nuevas estrategias de análisis a responsables políticos y líderes empresariales. El libro describe 55 técnicas diferentes seleccionadas entre más de 600 prácticas que han sido utilizadas habitualmente por los analistas de inteligencia. El texto describe los beneficios de utilizar cada una de las técnicas descritas y explica cuándo y cómo deben utilizarse. También tratamos de identificar las posibles dificultades existentes en el uso de estas estrategias.
¿Cómo pueden estas técnicas mejorar el trabajo de los servicios de inteligencia?
Estas técnicas analíticas estructuradas tienen, en mi opinión, tres grandes ventajas: aumentan la calidad de los análisis, así como su capacidad de convencimiento; animan la realización de análisis en equipo y ahorran tiempo.
En su opinión, ¿cuáles son los principales errores que suelen cometerse en los análisis de inteligencia?
Todos los analistas son susceptibles de cometer errores derivados de sus sesgos cognitivos y de sus trampas intuitivas. Los sesgos cognitivos pueden llevar a errores que supongan cerrar con antelación un análisis, antes de disponer de todos lo datos. Las trampas intuitivas pueden impulsar a hacer caso omiso a pruebas que se creen poco importantes o inconsistentes y también pueden llevar a trasladar al presente de un modo mimético experiencias pasadas que pueden resultar erróneas en un entorno diferente.
¿Estas nuevas técnicas analíticas estructuradas cómo pueden ayudar a la lucha global contra el terrorismo?
Algunas de estas técnicas han sido específicamente desarrolladas para el análisis contraterrorista. Esta nueva forma de analizar los datos ayuda a los analistas a anticipar de varias maneras la posibilidad de nuevos ataques terroristas, incluso los que no podían preverse de ninguna otra manera.
Los profundos cambios que estamos viviendo en el entorno de la seguridad global, ¿requieren nuevas formas de trabajar de las agencias de información?
Sí, es necesario otorgar más atención a la utilización de técnicas de previsión estratégica para desarrollar escenarios alternativos de cómo diversas cuestiones o problemas podrían evolucionar. Las técnicas de análisis estratégico no tratan de predecir el futuro, sino que indican diversas trayectorias de lo que puede llegar a ser. Se desarrollan indicadores para evaluar qué trayectoria es más probable que surja, lo que permite tomar anticipadamente decisiones para potenciar la aparición de los escenarios más positivos y mitigar el impacto de las situaciones negativas. La clave para realizar un buen análisis de previsiones se encuentra en desarrollar un conjunto refinado de factores claves que permitan interpretar claramente determinadas señales en medio de un gran ruido informativo.
En su opinión, ¿cuáles son en estos momentos los mayores riesgos para la seguridad de las sociedades abiertas?
Para las próximas décadas, los principales riesgos para la seguridad global van a llegar de los ataques cibernéticos, de los terroristas actuando como “lobos solitarios” y de la creciente incapacidad de los líderes políticos para participar de un discurso racional. Un reto cada vez más importante consistirá en lograr impedir que nuestros enemigos roben propiedad intelectual crítica e información clasificada. También es preocupante la capacidad de nuestros adversarios para acceder y modificar bases de datos existentes. Por otro lado, la amenaza terrorista será cada vez más difícil de contrarrestar a medida que más personas se radicalicen a través de Internet. Tanto en Europa como en Estados Unidos, una preocupación creciente es la aparición de discursos políticos radicales que buscan dividir en lugar de gobernar para todos.
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